22 abril 2010

Dejan atados a sus hijos de la ventana porque no pueden pagar guardería

La otra cara de la explotación china  :-(


Dejan a sus hijos atados a la ventana y comienzan su jornada laboral. Frente a la imagen de súper potencia de la economía de China, el país más poblado del mundo, la realidad de muchos trabajadores migrantes internos es otra: cuando salen a trabajar no tienen con quién dejar a sus bebés y sus sueldos son tan bajos que no llegan a cubrir ni la más básica guardería.

Publicadas por Dailymail, algunas imágenes fueron tomadas en una fábrica de la ciudad de Jiaxing, en el sudeste del país. Se estima que en China hay al menos 110 millones de trabajadores migrantes de entre 16 y 40 años que cumplen jornadas de al menos diez horas. Al no poder pagar para que cuiden a sus pequeños, los llevan y los dejan atados con bandas elásticas de la reja de las ventanas.

Aunque de esa manera logran mantenerlos a salvo de accidentes o de los traficantes de bebés, los pequeños infantes quedan por horas sin hacer nada, salvo mirarse entre ellos o mirar a lo lejos cómo trabajan sus padres.

Chen Chuanliu, padre del niño que aparece en las fotos atado con una cadena a un poste, trabaja con una calesa tirada con bicicleta, aunque no tiene licencia. En tanto, la madre junta basura en la calle. Al igual que los trabajadores de las fábricas, aseguran que lo poco que ganan deben gastarlo en comida, la renta del alquiler y los altos gastos en salud , dado que son trabajadores migrantes dentro del país, pero de otra ciudad.

Preocupados al ver a los niños, varios transeúntes denunciaron a Chuanliu ante las autoridades, aunque finalmente el jefe de una guardería, identificado como Señor Pi, sostuvo que se hará cargo de los gastos para el ingreso del pequeño.

“El mayor problema que tienen es que no poseen un permiso de residencia permanente en Beijing”, afirmó Pi. De acuerdo a las leyes de China, al ser de otra ciudad, ni el chico ni su familia pueden tener acceso a salud o educación gratis, dado que son de otra ciudad.
 
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FUENTE: minutouno.com.ar

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